Estados Unidos debe dejar de intervenir en el proceso electoral de Venezuela, afirmó el presidente del país latinoamericano, Nicolás Maduro, al rechazar la evaluación de Washington acerca de los resultados de la votación del 28 de julio.
“Ahora, entonces, sale EE.UU. a decir que Venezuela tiene otro presidente. EE.UU debe sacar sus narices de Venezuela, porque es el pueblo soberano el que manda en Venezuela, el que pone, el que elige, el que dice, el que decide”, declaró Maduro durante una reunión con voceras y voceros de los Comités Locales de Abastecimiento y Producción (CLAP).
El mandatario describió la situación como “Guaidó parte 2”, con referencia al apellido del exdiputado que se autoproclamó presidente interino en 2019 y que desconoció el triunfo de Maduro en las elecciones de 2018, con el apoyo de Washington y de un grupo de gobiernos de América y Europa.
Recordó que la autoridad electoral del país, el Consejo Nacional Electoral (CNE), “sufrió un ataque brutal”, del cual responsabilizó al colectivo de piratas informáticos Anonymous. Ese grupo, dijo, “asumió su responsabilidad por el ataque contra 25 instituciones de Venezuela, para evitar que hubiera resultados electorales”.
“Por eso metí el recurso ante el Tribunal Supremo de Justicia. Entonces, el proceso en Venezuela aún sigue legalmente, constitucionalmente, institucionalmente está todavía por completarse, y EE.UU. hoy dice que tiene las actas y las pruebas ‘porque yo soy el CNE’ […] los fascistas son el CNE'”, comentó.
El Gobierno de EE.UU. reconoció este jueves al candidato opositor Edmundo González Urrutia como ganador de los comicios presidenciales en Venezuela, que según datos anunciados por el CNE, le dieron al presidente Nicolás Maduro un tercer mandato.
“Edmundo González Urrutia obtuvo la mayor cantidad de votos en esta elección por un margen insuperable. Observadores independientes han corroborado estos hechos, y este resultado también fue respaldado por encuestas a boca de urna y conteos rápidos el día de las elecciones”, reza un comunicado publicado por la oficina del secretario de Estado, Antony Blinken.
Para sostener su argumento, Washington apeló a la ausencia de publicación de datos detallados por parte de la autoridad electoral venezolana –que alegó el domingo que sufrió un “hackeo masivo”– y la publicación por parte de la oposición de lo que, en su decir, sería “más del 80 % de las actas recibidas directamente de los colegios electorales en toda Venezuela”.
Este jueves, el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) admitió el recurso que Maduro introdujera la víspera para peritar todo el proceso electoral, incluyendo el contraste de las actas, el ataque cibernético que sufriera el sistema de cómputo y los asaltos contra algunas de sus sedes en el interior del país.
A estos efectos, el máximo tribunal venezolano anunció el inicio de la investigación para el peritaje y citó a comparecer a los 10 candidatos, incluido González Urrutia, este 2 de agosto.