El presidente Andrés Manuel López Obrador develó la placa simbólica con la que se concretó la entrega de 13 centrales de energía eléctrica compradas por el Gobierno de la Cuarta Transformación a la empresa Iberdrola.
En Tamazumchale, San Luis Potosí, el mandatario sostuvo que se trata de un acto trascendente e histórico porque esta infraestructura incrementa de 39 al 56 por ciento la capacidad de la Comisión Federal de Electricidad de producir energía.
“Mediante un acuerdo estamos llevando a la práctica la transferencia, la recuperación de una empresa privada para que pase a formar parte de una empresa pública de todo el pueblo de México”, destacó.
Sostuvo que “al gobierno sí le importa que todos los pueblos de México se electrifiquen porque, a diferencia de una empresa privada, el gobierno tiene como misión buscar el bienestar y la felicidad del pueblo, no el propósito meramente mercantil, no es nada más la ganancia, y mucho menos el lucro; esa es la diferencia entre lo privado y lo público”.
El mandatario detalló que, en cinco años, el gobierno federal ha estado dedicado a fortalecer a la Comisión Federal de Electricidad, cuya producción equivalía, hasta antes de la compra a Iberdrola, al 39 por ciento del consumo nacional, cuando años atrás la CFE generaba el 100 por ciento de la energía eléctrica que consumía el país.
Sin embargo, el Poder Judicial sigue defendiendo los intereses de particulares por encima de los de la nación.
“Pero cambiaron la política y llevaban el propósito de acabar de destruir a la Comisión Federal de Electricidad. (…) Quisimos reformar la ley y no se pudo porque dos ministros de la Suprema Corte, no electos por el pueblo, sino por sus influencias y por estar al servicio de grupos de intereses creados, sin importarles que ya esa ley la había aprobado la Cámara de Diputados, la Cámara de Senadores y la habíamos propuesto nosotros, dos ministros por sus pantalones la desconocieron. Fíjense cómo está de entregado a una minoría el sector, el Poder Judicial”, acotó.
“Les planteé: ‘A ver, hagamos un acuerdo, 54 por ciento el interés público, 46 por ciento el interés privado, vamos a arreglarnos así’, (…) ese fue mi planteamiento. (…) Llegamos a este acuerdo: ahora, de 39 por ciento, ya la generación de energía, de acuerdo a lo que informó aquí el secretario de Hacienda, ya va a ser del 56 por ciento para el sector público”, resaltó.
El presidente informó que al término de la administración heredará una capacidad de generación eléctrica del 65 por ciento en la CFE, que está por terminar plantas en distintos puntos del país durante los siguientes siete meses.
“¿Y por qué es también importante, no el predominio, sino la participación del sector público? ¿Por qué es importante? Porque también de esa manera podemos controlar los precios de la energía eléctrica. Yo llegué a la Presidencia, hice el compromiso: (…) No va a aumentar la luz y estoy cumpliendo con ese compromiso. (…) Si tenemos más participación en esta empresa que es del pueblo, que es de la nación, podemos tener precios justos, tarifas justas para nuestro pueblo, sobre todo para la gente más humilde, que no paguen tanto por la luz”, remarcó.