El novedoso misil de alcance intermedio Oréshnik “puede impactar contra los objetivos en todo el territorio de Europa, lo que lo distingue de otras armas de precisión de gran alcance”, ha declarado este viernes el comandante de las Tropas de Misiles de Designación Estratégica de Rusia, Serguéi Karakáyev, durante una reunión con el presidente Vladímir Putin.
El uso intensivo de este tipo de armamento “será comparable con el uso de armas nucleares”, agregó, señalando que el desarrollo de Oréshnik permitirá “ampliar las capacidades de combate de las Tropas de Misiles de Designación Estratégica para destruir diversos tipos de blancos, conforme a las tareas asignadas, tanto en la versión no nuclear, como en la nuclear”.
“La alta disponibilidad operativa del complejo permite apuntar y destruir cualquier blanco designado lo más rápido posible”, destacó Karakáyev, proponiéndole al mandatario ruso incluir al Oréshnik en el arsenal de las Fuerzas Armadas del país y seguir usándolo, “intensificando sus características y perfeccionando las destrezas del personal en su manejo y uso”.
“Lo haremos. Gracias”, respondió Putin.
El presidente ruso ha anunciado esta jornada que pronto comenzará la producción en serie de los novedosos misiles, que mostraron sus capacidades en una exitosa prueba contra un complejo de industria de defensa ucraniano en la ciudad de Dnepropetrovsk el día anterior.
Putin reiteró que, a día de hoy, no existen en el mundo medios que puedan interceptar un misil Oréshnik, que se convierte asimismo en otro garante fiable de la integridad territorial de Rusia.