El rapero estadounidense Sean Combs, conocido artísticamente como P. Diddy, ha intentado chantajear a los testigos de su juicio y cambiar la narrativa de la opinión pública desde la cárcel de Nueva York, de acuerdo con una presentación judicial de los fiscales del caso.
Las acusaciones fueron presentadas este viernes ante un tribunal federal de Manhattan, y buscan que el juez rechace la última petición de Diddy de obtener la libertad bajo fianza de 50 millones de dólares, según la CBS.
El expediente incluye el registro de las llamadas telefónicas del rapero desde la prisión, en las que se muestra cómo ha pedido a sus familiares que se pongan en contacto con las posibles víctimas y testigos y los ha instado a inventar “narrativas” para influir sobre el jurado. Adicionalmente, presume que Combs ha fomentado la creación de estrategias de ‘marketing’ para cambiar la opinión pública.
Los fiscales también alegan que el rapero ha tenido un comportamiento incorrecto desde que fue detenido en Brooklyn, después de su arresto el 16 de septiembre por crimen organizado y tráfico sexual. De acuerdo con el documento, se puede deducir que el magnate de la música quiere chantajear a los involucrados para que guarden silencio o testifiquen a su favor.
“El acusado ha demostrado en repetidas ocasiones, incluso mientras se encontraba detenido, que violará las normas de manera flagrante y reiterada para influir indebidamente en el resultado de su caso. El acusado ha demostrado, en otras palabras, que no se puede confiar en que cumpla las normas o las condiciones”, escribieron los fiscales.
La audiencia sobre la fianza se llevará a cabo la próxima semana.