ADRIANA PAZ, LA NUEVA CARA MEXICANA DEL CINE INTERNACIONAL

Espectáculos

Versátil y redefiniendo a las nuevas generaciones en el mundo del cine, Adriana Paz es una talentosa actriz que ha logrado reconocimiento tanto a nivel nacional como internacional, especialmente por su papel en la película Emilia Pérez.
A lo largo de su carrera, la mexicana en ascenso ha demostrado su capacidad para transformar cada personaje en algo único. Un ejemplo destacado es su interpretación en La Tirisia (2014), dirigida por Jorge Pérez Solano, donde encarnó a Cheba, una mujer que enfrenta las duras realidades de su entorno. Su actuación en esta película le valió el Ariel a la Mejor Actriz de Reparto (hasta el momento ha ganado tres de manera consecutiva), consolidando su reputación como una actriz capaz de transmitir emociones profundas y complejas. Sin duda, es un claro ejemplo de perseverancia y talento.
En octubre de 2024, Adriana Paz celebra a todas esas mujeres que rompen barreras y logran cumplir sus sueños a través del arte: “Nunca me compré los estereotipos. Jamás los acepté”, confesó en nuestra entrevista exclusiva, en la que nos reveló los desafíos a los que se ha enfrentado en la industria del entretenimiento, además de compartir su experiencia tras su reconocimiento en el Festival de Cannes 2024.

  • ¿Qué te atrajo del guión de Emilia Pérez y te motivó a formar parte de este proyecto?
    “Hace casi dos años, cuando estaba rodando La Rebelión, me llegó el casting de Emilia Pérez a través de mi representante en Estados Unidos. Hice la audición y, aunque tardaron en darme una respuesta, finalmente fue positiva. Fue un poco estresante, porque siempre tienes la incertidumbre de cómo te fue, y la espera se vuelve difícil. Creo que esa es una de las partes más complicadas para cualquier actor: no saber si fuiste elegido o no. Pero al final, integrarme al elenco fue algo increíble, sobre todo ir viviendo el proceso paso a paso”.
  • ¿Cómo describirías a tu personaje en la película y qué desafíos encontraste al interpretarlo?
    “Mi personaje, Epifanía, es una mujer que ha sufrido maltrato y es víctima de violencia, representando la realidad de muchas mujeres en México y en el mundo que enfrentan riesgos cotidianos, desde violencias menores hasta feminicidios. A pesar de su situación, ella no pierde la esperanza; su ingenuidad no es tonta, sino una forma de seguir creyendo en un futuro mejor, lo que le permite descubrir cosas nuevas sobre sí misma y su entorno. Es una mujer fuerte y decidida, y la película abarca varios géneros y temas sociales relevantes”.
    “Interpretar a Epifanía fue un desafío porque debí encontrar el equilibrio entre su vulnerabilidad y fortaleza, así como reflejar las complejidades de su carácter en el contexto de la historia”.
  • ¿Qué mensaje esperas que el público se lleve después de ver este filme?
    “Creo que es difícil encasillar a Emilia Pérez en un solo género, ya que mezcla varios elementos: es un musical, tiene comedia pero también drama. Más que esperar que el público se lleve un mensaje específico, me gustaría que disfruten la película, que la vivan con la misma emoción que yo siento como espectadora. Es una cinta salvaje, audaz, creativa y valiente. A pesar de abordar temas fuertes, tiene una poética que la convierte en una obra hermosa en muchos sentidos”.
    “Además, es la historia de cuatro mujeres que están buscando su lugar en la vida, tratando de ser la mejor versión de ellas mismas. Creo que uno de los mensajes más importantes es el de la fe, el amor y cómo superar la violencia. La vida no se acaba hasta que morimos, siempre podemos reflexionar sobre nuestros actos y tomar decisiones para cambiar, por pequeñas que sean. Es válido equivocarse, pero también es importante reconocer los errores, aprender de ellos y buscar ser mejores, tanto con nosotros mismos como con los demás”.
    “También creo que, como mexicanos, muchos temas sociales que toca la película nos llegan de manera muy directa, y eso puede generar una reflexión profunda”.
  • ¿Cómo te preparaste para ser parte de Emilia Pérez?
    “En este caso, lo que más me retó fue la parte musical, ya que es algo menos cercano a mí. Aunque he cantado antes, como en Bellas Artes durante los Arieles en 2013, no me considero una cantante profesional. Las personas que se dedican de lleno al canto han recibido una preparación extensa, y yo no tenía ese bagaje. Sin embargo, fue un desafío que disfruté muchísimo, más que demandante, fue emocionante. Me encantó tener la oportunidad de tomar clases de canto, algo que había querido hacer desde hace tiempo”.
    “Desarrollar mis habilidades vocales fue un proceso fascinante. Creo que esta experiencia fue diferente a otros proyectos precisamente por esa oportunidad de aprender algo nuevo. Para mí, cada proyecto es una oportunidad para seguir tomando clases, reinventarme y emprender nuevos desafíos. ¡Descubrir y explorar nuevas facetas siempre es interesante!”.
  • ¿Cómo fue trabajar con Zoe Saldaña, Karla Gascón, Selena Gomez y el resto del elenco?
    “Trabajar con ellas fue increíble. Son mujeres muy amables y trabajadoras, que se esfuerzan y están muy bien preparadas. Zoe es la única actriz que ha estado en las dos películas más taquilleras de la historia. Karla, por su parte, tiene una fuerza increíble. Lo que hizo con el personaje de Emilia es maravilloso, conmovedor y lleno de poder. Su actuación es muy impactante; tiene una mirada que puede ser tierna o densa y también puede infundir miedo. Por eso logra hacer tan bien ambas facetas del personaje”.
    “Además, todas fueron compañeras muy generosas y amables. Fue muy bonito trabajar especialmente con Karla, ya que compartimos más escenas juntas. Aunque también disfruté las pocas secuencias que tuve con Zoe; ella fue súper amable desde el principio. En las pruebas de vestuario, cuando nos conocimos, me dijo: ‘¡Adriana, por fin te conozco!’, lo cual fue un gesto muy lindo”.
    “Es un trabajo en equipo, y es importante que todas estemos dispuestas a apoyarnos mutuamente. No solo querer brillar una misma, sino ayudar a que las demás destaquen, porque en la medida en que el otro triunfa, tú también lo haces. Mis compañeras entendieron eso muy bien, y lo agradezco muchísimo. Fue una experiencia que me encantó”.
  • ¿Cómo fue ser nombrada mejor actriz en Cannes?
    “Es algo que no planeas y que, aunque puedas imaginarlo de muchas maneras, nada se compara con la realidad. Pasar por la alfombra roja fue un momento de asombro: ‘wow, estoy aquí, en Cannes, en competencia oficial, con este elenco y este director’”.

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